Ya sabemos que una buena alimentación es esencial para garantizar la salud y el bienestar de nuestros queridos gatos. Ellos, al igual que el resto de los seres vivos, requieren una dieta equilibrada para mantenerse en forma y sobre todo, para prevenir problemas de salud a largo plazo.
En primer lugar, es crucial seleccionar un alimento de calidad diseñado específicamente para gatos. Estos alimentos contienen los nutrientes esenciales que ellos, como felinos que son, necesitan para un desarrollo adecuado y una vida saludable. Debemos buscar dietas que contengan un nivel alto de proteínas, pero siempre de muy alta calidad, ya que los gatos son carnívoros estrictos y necesitan una cantidad significativa de ellas para mantener su masa muscular y energía. No sólo es importante el porcentaje de proteínas que nos marque la etiqueta del envase, sino la calidad de éstas.
La hidratación es otro aspecto fundamental a tener en cuenta. Debemos asegurarnos de que nuestro gato tenga acceso constante a agua fresca y limpia. Algunos gatos pueden ser reacios a beber suficiente agua, por lo que proporcionar a diario alimentos húmedos o agregar un poco de agua al alimento seco, puede ser una buena opción para mantenerlos hidratados.
Además, y esto es lo que más echamos en falta en la consulta, debemos controlar la cantidad de ingesta diaria para evitar problemas de peso. La obesidad en gatos puede llevar a una variedad de problemas de salud, como diabetes, artrosis, enfermedades respiratorias y enfermedades cardíacas.
Podemos seguir las recomendaciones de alimentación que nos indica el envase del alimento, pero a medida que nuestro gato evoluciona, hay que ajustar las raciones según la edad, peso y nivel de actividad. En las revisiones rutinarias os vamos orientando según la necesidad específica de cada uno.
Los premios también forman parte de la dieta diaria de un gato. Son muy importantes para la relación familiar y para obligar al gato a hacer ejercicio (si no lo hace), pero debemos limitar y ajustar la cantidad de golosinas en función del resto de la dieta y por supuesto, asegurarnos de que sean también de alta calidad. Los premios son una excelente manera de recompensar y jugar con nuestro gato, pero el exceso de ellos provoca un inevitable exceso de calorías, lo que puede contribuir a un aumento de peso no deseado.
En resumen, una buena nutrición es esencial para la buena salud de nuestros gatos. Debemos optar por alimentos de calidad, proporcionar agua fresca, controlar la ración diaria, elegir premios saludables y mantener, sobre todo, un seguimiento regular con nosotros en la clínica, lo cual es clave para ajustar la dieta según las necesidades cambiantes del gato a lo largo de su vida.
Con una atención adecuada a la dieta, podemos contribuir significativamente a la vitalidad y longevidad de nuestro pequeño felino.