Es motivo de consulta frecuente si es normal que vuestro amigo esté bebiendo mucha agua, o que se orine en casa o en zonas donde habitualmente no suele hacerlo.
Se considera que un animal bebe mucho cuando su ingesta de agua supera los 100 ml por kg. de peso. El aumento del consumo de agua (polidipsia) tiene como consecuencia natural la producción de cantidades de orina superior a lo normal (poliuria) pero es cierto que existen muchas y muy variadas enfermedades que cursan con poliuria:
- Enfermedades renales
- Insuficiencia hepática.
- Diabetes mellitus.
- Piómetra (infección de útero)
- Hipertiroidismo (aumento en la producción de hormonas del tiroides).
- Hipercalcemia (aumento del calcio)
- Síndrome de Cushing (aumento en la producción de cortisol), etc…
Para realizar el diagnóstico de la enfermedad que está produciendo la poliuria-polidipsia es necesario obtener una serie de datos.
- La exploración física es una fuente importante de información. En ella hacemos una exploración general revisando el estado del animal. También comprobamos la existencia de signos compatibles con las distintas enfermedades que producen poliuria.
- El siguiente paso es la realización de pruebas laboratoriales. En ellas hay que incluir un análisis de sangre completo y un análisis de orina.
Una vez tengamos una serie de datos iniciales, es posible que sea necesario realizar pruebas más específicas, bien porque aún no tengamos un diagnóstico definitivo, bien porque necesitemos resultados de pruebas más concretas para apoyar nuestro posible diagnóstico, como la ecografía abdominal.
Siempre es mejor prevenir que curar así que, si ves que tu mascota bebe y orina más de lo normal o crees que lo hace más de lo habitual, debes acudir siempre a la clínica para poderle realizar la exploración física y las pruebas pertinentes y llegar a un diagnóstico definitivo.