Muchos de vosotros nos preguntáis cuando puede alcanzar una perrita la madurez sexual…
En el caso de las perras de raza pequeña su primer celo puede aparecer entre los 6 y los 9 meses, mientras que las de raza grande suelen tener el primer celo entre los 9 y los 12 meses.
¿Cómo afecta el celo a las perras?
Generalmente antes del primer celo comienzan a tener un comportamiento más “raro”, suelen llamar la atención de los machos, ya que comienzan a tener un cambio hormonal, su vulva comienza a inflamarse, podéis notarlas más cariñosas y que se lamen más la zona vulvar.
Pero el celo comienza realmente cuando la hembra expulsa un líquido sanguinolento por la vulva. Esta fase se llama proestro (fase de sangrado activo), suele durar de 7-12 días y aunque la hembra llama amorosamente la atención del macho, en esta fase no se va a dejar montar.
Es en la siguiente fase llamada estro ( su vulva está muy edematosa e inflamada y la secreción vulvar es más diluida) cuando la hembra estaría receptiva al macho. Esto ocurre entre el día 9-12 de haber iniciado el sangrado. Sería el momento en que la hembra puede quedar gestante si se realiza una monta. Durante todo este proceso la perrita puede comer menos, estar menos activa, orinar con más frecuencia, aunque puedes realizar con ella una vida normal, siempre atada para evitar sustos o contratiempos inesperados. Se puede bañar y si necesita algún tratamiento especial (vacunaciones o desparasitaciones) puede realizarse sin problemas.
Una perra puede tener signos de celo entre dos o tres semanas, es decir, que puede estar manchado durante todo este tiempo: al principio será una sangre limpia y posteriormente una sangre más diluida.
¿Cada cuánto tiempo tienen el celo las perras?
La frecuencia de los celos en una hembra en condiciones normales es cada 6 meses aproximadamente, aunque hay algunas que pueden ciclar una vez al año.
Si aumenta la frecuencia de los celos, o deja de tener el celo, puede haber algún problema, por lo que es importante que nos consultéis estas cuestiones, ya que los trastornos en los celos pueden estar asociados a quistes ováricos, endometritis u otros problemas más serios.
Las hembras tienen el celo durante toda su vida, en ellas no existe la menopausia, si bien es verdad que los celos pueden ser más cortos y con menos sangrado vaginal.
Algunas perritas a los 2 meses del celo pueden desarrollar un embarazo psicológico o pseudogestación. Se produce un cambio hormonal (aumento de la hormona prolactina) que genera inflamación de las mamas, e incluso la producción de leche. En estos casos es importante acudir al veterinario para tratar este proceso y evitar complicaciones.
¿Cómo afecta el celo de las hembras a los machos?
Los síntomas más frecuentes que puede presentar tu perro en épocas de celo es que no quiera comer o que disminuya su apetito, que esté obsesionado por salir a la calle y olisquear la orina de las hembras, su próstata suele inflamarse por estimulación hormonal y aumenta el marcaje de orina.