Llega la época estival y con ella los ansiados días de descanso. Esto conlleva que nos desplazamos más y por supuesto lo hacemos con nuestras mascotas.
Pero, ¿todas las mascotas llevan igual de bien los viajes? Claramente no.
Es frecuente que se mareen en los viajes, principalmente en el coche, que es donde los vemos durante todo el trayecto, pero también en otros medios de transporte.
¿Cómo sabemos que una mascota se marea? Lo más frecuente es que se muestre apagada, suele presentar un babeo excesivo y en muchas ocasiones llega a vomitar, aunque también puede presentar estos síntomas unidos a hiper excitación, que en caso de los gatos se traduce en maullidos constantes.
Si sabemos que nuestra mascota se marea, podemos tomar unas medidas previas para aliviarla y evitar que lo pase mal. Lo primero que tenemos que hacer es intentar acostumbrarla al medio de desplazamiento que vayamos a usar, si es el coche haciendo desplazamientos cortos y frecuentes para que lo vea como normal. Además, conviene llevarlas en ayunas de comida e incluso de unas horas de agua si es de las que vomitan seguro.
Antes se usaban calmantes para evitar estos síntomas, pero hoy en día preferimos otros tratamientos que les relajan y les calman la ansiedad del mareo sin alterarles las consciencia. Son mucho más seguros y además ayudan a la mascota a aprender a viajar, que es nuestro objetivo. Según la mascota, el nivel de mareo o ansiedad y la duración del viaje os recomendaremos una u otra solución.
En el caso de los perros tenemos la suerte de contar además con un tratamiento que evita con mucha efectividad el vómito por mareo, es seguro y basta con administrarlo alrededor de una hora antes del viaje. Por supuesto no es un sedante y mantiene al perro en todo momento en su estado habitual.